

Sobre mi historia:
De la Necesidad a la Estrategia
Mi historia no comenzó en una universidad ni con un capital heredado. Empezó a los 14
años, con la decisión de forjar mi propio camino. Fui lo que llaman un "mil usos"
aprendiendo el valor del trabajo y la resiliencia cuando no tienes una red de seguridad.
Descubrí mi vocación en las ventas, un mundo donde los resultados hablaban por sí solos.
Mi impulso me llevó a ganar premios, como un viaje a Brasil para mi esposa y para mí, y
eventualmente a la Gerencia Regional en Sam's Club. Allí, no me limité a gestionar; diseñé
estrategias de mercadotecnia que rompieron récords y que, me enorgullece decir, se
convirtieron en políticas a nivel internacional. Aprendí a construir sistemas, no solo a vender
productos.
Llevé esa visión a mi propio emprendimiento, creando un sistema pionero de recargas
electrónicas que llegó a facturar más de un millón de pesos al día. Y entonces, cuando
estaba en la cima, lo perdí todo. Un fraude digital me obligó a empezar, una vez más, desde
cero.
Fue en esa reinvención forzada que encontré mi verdadera pasión: los bienes raíces.
Entré a un desarrollo en Juriquilla, y mi enfoque nunca fue solo vender casas, sino diseñar
una estrategia a la medida para cada cliente. El resultado fue inmediato: mientras el
promedio del equipo era de 2 a 3 ventas mensuales, yo promediaba 9. Poco después, tomé
un proyecto estancado y, tras un análisis profundo, llevé sus ventas de cero a casi 20 casas
al mes. Incluso desarrollé métodos innovadores, como una estrategia que permitía a mis
clientes adquirir su terreno prácticamente sin costo.
Hoy, he unido todas esas experiencias —el éxito corporativo, el fracaso estrepitoso y la
reinvención estratégica— en una sola misión: ser el asesor financiero que mis clientes
necesitan para construir su patrimonio. Mi especialidad es doble: crear equipos de ventas
de alto rendimiento para desarrollos inmobiliarios y, sobre todo, guiar a inversionistas para
que tomen las decisiones más inteligentes de su vida financiera. Y para respaldar la
experiencia con la mejor teoría, cursé diplomados en Administración Estratégica en la
UNAM y en Finanzas para el Sector Inmobiliario en la Anáhuac.

El Hombre Detrás del Estratega
El motor de todo es mi familia. Llevo 32 años felizmente casado y mi mayor orgullo es haberles dado a mis dos hijos la carrera universitaria que yo no tuve: Alex Jr., un brillante Financiero en GE, y Jorge, un talentoso Comunicólogo en una prestigiosa agencia de marketing.
Cuando no estoy analizando el mercado, me encontrarás jugando una partida de ajedrez (el mejor entrenamiento para un estratega), leyendo una buena novela o planeando el próximo destino a visitar con mi esposa y amigos. Ya son 28 países, y la lista sigue creciendo.
Mi pasado, con sus altibajos, es tu mayor ventaja. Permíteme usar esa experiencia para ayudarte a construir tu legado
Vamos
a mis redes





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